En un momento financiero como el actual en el que las empresas han vuelto a resurgir y necesitan crear y desarrollar nuevos proyectos para su expansión y mejora, las entidades financieras deben ofrecer a estas las garantías y herramientas para lograr una estabilidad y seguridad a la hora de desarrollar dichos proyectos. Para ello, uno de los recursos imprescindibles son las líneas de crédito.
¿Qué son las líneas de crédito?
Las líneas de crédito son un contrato realizado entre una entidad financiera y un cliente. La entidad pone a disposición del cliente un límite de crédito del que dispondrá durante un plazo especificado de tiempo. Este tipo de créditos se utilizan para costear necesidades que puedan producirse en diferentes etapas o fases de una empresa, siempre en relación a cobros y pagos. Su efectividad reside en que el cliente dispone del dinero en el momento y en las cantidades que requiera dentro de un plazo de tiempo y un máximo de crédito.
¿Cuál es la labor de cada uno de las partes del contrato?
El cliente tiene que firmar un contrato con la entidad, dentro del cual figura la obligación de devolver el importe del crédito solicitado; dentro de plazo especificado. Por su parte la entidad financiera estará obligada a disponer de ese dinero del cliente hasta el final del contrato y una vez finalizado podría considerarse la opción de renovarlo.
Esta renovación ocurre ya que si una empresa durante un año ha requerido de esa financiación, es posible que al año siguiente lo vuelva a necesitar. Es por ello que las entidades financieras disponen de dos tipos de financiación circular: La renovación extintiva, es decir, extinguir un contrato existente y crear uno nuevo. Por otro lado la renovación de la línea de crédito, es decir, prolongar un acuerdo previamente acordado cambiando la fecha de vencimiento.
En el caso de que la parte solicitante no cumpla con el plazo establecido en el contrato o alguna otra de las cláusulas podría darse el caso de que se dé una resolución de contrato.
¿Cuál es la composición de una línea de crédito?
Consiste en un contrato mercantil, en el que tanto la entidad financiera como el cliente cuenta con obligaciones a cumplir. En las líneas de crédito el cliente tendrá que hacer frente a unos intereses y comisiones establecidas por la entidad. Además de esto este tipo de crédito siempre contiene un importe máximo de disponibilidad que es el límite de riesgo máximo que se pueda conceder y un plazo de duración, que en la mayoría de los casos son anuales.
¿Tipos de líneas de crédito?
Las empresas cuentan con una gran variedad de líneas de crédito dependiendo de las necesidades que tengan o los gastos que deban suplir. Estas son algunas de ellas:
- Rotativos: Son aquellos en los que el crédito se puede utilizar varias veces siempre y cuando se haya cumplido con las cuotas y se haya dado un buen uso al dinero.
- Acumulativo: Si durante un tiempo no se hace uso de él, puede utilizarse posteriormente
- No Acumulativo: Si durante un tiempo no se utiliza el dinero dejará de estar disponible.
- Crédito de tesorería: Consiste en un crédito a corto plazo que sirve para financiar acciones distintas al gasto de inversión que adelantan las entidades territoriales y empresas
- Crédito para vehículos:Consiste en un crédito que sirve para comprar un vehículo que pueden ser nuevo o de segunda mano de origen estatal o de fuera del país.
- Créditos para empresas:Trata el crédito que se destina a satisfacer necesidades de empresa. Normalmente se utiliza para capital de trabajo, maquinaria y equipos, inmuebles y vehículos.
¿Qué diferencia hay entre una línea de crédito y una línea de descuento?
Línea de descuento es un crédito que sirve para anticiparse documentos tales como cheques, pagarés o letras de cambio antes de que estos lleguen a su fecha de vencimiento. Mediante estos las empresas pueden anticiparse al cobro. A cambio de esto el cliente tendrá que pagar unos intereses calculados mediante su fecha de vencimiento y el importe anticipado.
La diferencia está en que mediante la línea de crédito el cliente cuenta con ese dinero para ir utilizándolo durante un tiempo según lo necesite. Por su parte la línea de descuento sirve para realizar pagos o gestiones en un momento puntual y en este caso el tiempo para devolver el dinero será inferior.
Conclusiones
Las líneas de crédito son un colchón con los que cuentan tanto empresas como autónomos para poder suplir necesidades que pueden llegar a tener durante un plazo de tiempo. A cambio de este crédito el cliente tendrá que pagar unas comisiones y tasas.
Tanto el cliente como la entidad financiera tendrán que cumplir con algunos compromisos al acordar la línea de crédito y acordarán unas condiciones en el contrato. En el caso de que no se cumpla con lo establecido en el contrato, este se disolverá.
En el caso de que el cliente requiera renovar la línea de crédito tendrá la opción de hacerlo siempre que haya hecho un buen uso de la anterior.
Hay diferentes tipos de líneas de crédito a los que los clientes pueden acceder dependiendo de las necesidades que tengan.
Por último, muchas veces puede dar lugar a confusión entre las líneas de crédito y las líneas de descuento. Las líneas de crédito servirán para contar con una estabilidad a largo plazo, mientras que las líneas de descuento servirán para anticiparse a pagos a corto plazo.